Los botones más especiales de La Crisálida

Nos sumergimos en el almacén de la mercería La Crisálida y hacemos una lista de los seis botones vintage más exclusivos y singulares de su colección (todos disponibles en su página web).

jun 01, 2025

Mercería La Crisálida es un nombre que no pasa desapercibido ante nadie. Si ya antes era un comercio bien conocido por todos los coruñeses, ahora, su influencia trasciende los límites geográficos de su ciudad y alcanza lugares remotos gracias a las plataformas digitales. Con más de medio millón de fans en Instagram, y casi un millón y medio en TikTok, La Crisálida es un ejemplo paradigmático de cómo el comercio local se puede ayudar de las redes sociales y el lenguaje de Internet para reinventarse y sobrevivir.

El responsable detrás de este renacimiento es Ramón Santos, cuya voz pronunciando las palabras “acompáñame a buscar un botón” despierta grandes sensaciones en toda su comunidad de seguidores. Con más de 80 años de historia, La Crisálida abrió al público en 1942, con Josefa Seoane al cargo, y su actividad se extendió hasta 2019. Cuando Ramón vio que la mítica mercería de la calle San Andrés cerraba sus puertas, no dudó ni un momento en coger el traspaso y hacer de ella una tienda adaptada a la nueva realidad digital. Ahora, la historia de La Crisálida ha sido plasmada en un libro que firma Ramón Santos para la editorial Planeta, y que verá la luz el día 11 de junio.

Cuando entro en la mercería, Sabela, alegre, detrás del mostrador, me dice que Ramón está de camino, atrapado en el tráfico de media tarde. En los no más de cinco minutos que espero su llegada, dos personas entran preguntando por él. El pan de cada día, me dice Sabela. Y es que puede que Ramón sea el mercero más célebre de la comunidad hispanohablante. Cuando llega, me saluda amablemente y me hace un tour por La Crisálida. Aunque por fuera parece una mercería normal, de las de toda la vida, dentro esconde un sinfín de pasillos que guardan botones, medias e hilos que quedaron sepultados en el almacén, y que Ramón resucita en sus vídeos, un contenido que apasiona a sus seguidores, entre los cuales me incluyo. Dentro también se imparten las clases de costura, lo que hace que en el interior de la tienda haya un vaivén constante de personas, creando un caos organizado propio de las película de Berlanga. Charlamos en la primera planta, al lado del set up the La Crisálida: un pódcast con aguja e hilo.

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